ETERNO RETORNO

Estas historias son como lanitas sueltas que la nona va ovillando en un bollito y una vez que adquiere volumen, las va desovillando para hacer algo con todas como si fueran una sola cosa. Así son estas narraciones, dichos, frases sueltas, conjeturas patinadas por una memoria tenue que -a veces- toman forma en la mano de quien las intenta reunir.

sábado, 28 de junio de 2014

Paralipómenos de la década netomanciera

Varios de los energúmenos que asistieron a los festejos (extra)oficiales de la década de Netomancia son víctimas de su propio deseo de encontrarse para dar una puntada más al flojo hilván que los reúne de vez en cuando.Baste decir que proponer fecha y hora resultó un trámite sencillo. Repasemos un poco estos aconteceres centrándonos en los desvivires del anfitrión.

Dado que a nadie le gusta laburar, el señor Neto lanzó el aviso con suficiente antelación. Por las dudas, Don Belce no metió la cola, es ladino pero no tonto, sabe que si la embarra no morfa. Entonces ofreciose para cortar las verduritas aun descreyendo que el evento llegase a tomar forma.
Osval y Paul colaborando con la preparación.
A veces los comienzos no son los más auspiciosos. Llegan temprano Paul The Walrus y el Osval. El anfitrión -en adelante quien protagoniza todas las oraciones sin sujeto- supone que es para dar una mano. En su lugar se acomodan como larvas en las sillas a la espera de que Chile - Australia los lleve a modo ninfas.
Resignado, parte a hacer las compras. Una vez que compra todo y abona en la caja del super, aparece Álvarez como quien no quiere la cosa. Bah, como quien no quiere hacer fuerza cargando con las bolsas. Luego de amenazas varias, accede.
El anfitrión carga bolsas y belces en el auto y se dirige a su hogar. Casi imposible llegar. Autos estacionados de la maneras más insólitas bloquean todo intento de acceso. El portaaviones de Decur bloquea varias entradas de vecinos; luego Rafa, para no ser menos, lo imita. Maniobra cuidadosamente contabilizando menos de cuatro roces. Éxito.

Llegan. Están presentes los mencionados Osval, Paul y Sergio. Sumáronse a ellos Decur y Noshe. Cualquier observador casual supone que es personal suficiente para llevar adelante el pollo al disco. Error. Paul y Osval parten con rumbo indefinido cuando el anfitrión comienza a repartir tareas. Sergio y Decur evitan todo esfuerzo con el sencillo expediente de intercambiar pareceres acerca de la relación con el sexo femenino. Queda Noshe, a quien se le pide que se encargue de la picada previa. Olvida la picada y entra a descorchar tintos, demostrando una habilidad supina.
El anfitrión, resignado, se pone a pelar y cortar los pollos.
Neto dando órdenes -a los gritos- que nadie acata.
Llega Neto. Su presencia amenazante obliga a los demás a colaborar. Obligación que dura cinco minutos. Neto solito se pone a cortar verduras. Sergio y Decur continúan destilando penas, esta vez con un tinto generoso lubricando las asperezas. Llegan Paul y Osval -que aprovecharon la llegada de Rafa y el entretiempo del partido para salir a rastrear los bebestibles- debatiendo sobre la formación de Polonia o algo así para evitar les sean asignadas tareas que maculen sus delicados dedos.
Con los dedos cortajeados por su torpeza a la hora de manejar la cuchilla, el vaso y pelar maníes a la vez, ordena (tarde) que no mezclen los zucchinis con el resto del verduraje cortado. Neto y Paul se dedican a la separación, los vapores etílicos producen una niebla que les impide llevar a cabo la tarea con eficiencia.
Mesita auxiliar. Nótese el vaso que Paul se empeñó en volcar.
Primer plano: confesiones. Segundo plano: tensa calma
Se dirige hacia una habitación a medio terminar donde están dispuestos unos extraños artilugios. Y varios cajones de finas tablas que serán el combustible. El Bombón intenta orinar a todo el que se acerque, excepto al anfitrión. El perro falla. Enciende el fuego, mientras prepara una mesa con todos los ingredientes a cocinar al disco. Noshe prepara -e ingiere- la picada, compuesta por mortadela, queso y paleta de cerdo, la que es deglutida antes de que toque la mesa. Sergio y Decur interrumpen su coloquio solamente para emitir sonidos guturales, todos temen la aparición de algún alien de esos vientres sonoros.

El anfitrión posando
Cocina. De vez en cuando alguno se acerca para hacer comentarios del estilo: qué bueno, fantástico, va a estar excelente, el humo le da un sabor que..., nadie acerca un vaso con tinto. Algunos turistas japoneses toman fotos. Dentro, los brindis se suceden.

Paul ejecuta una danza hipnótica que lo lleva a volcar el vaso del anfitrión sobre el celular, nadie presta atención a los chispazos que emite.
La comida está lista. Se suceden llamados a José Hugo, quien asegura estar en viaje. Media hora para diez cuadras no es mal promedio.
José Hugo entra a los trompicones, como se observa. Su entrada espectacular sólo es atendida por los más cercanos que temieron derrame sus vasos. Se hace lugar en la punta de la mesa en medio de un torbellino de sonidos entrechocantes.
José Hugo llegando famélico
 Virginia y Bárbara deciden sobrevivir, llenan una fuente del misterioso preparado y se van a comer a lo de la abuela. El lobo no las sigue, es hora de comer. Apréciese el gesto desesperado de Decur, quien espera volver a cenar luego de varias semanas. Rafa, indolente, se remite a suplir el vacío gástrico con la ingesta de abundante caudal líquido.
Decur y Rafa, impacientes
Se lleva el disco a la mesa. Noshe se sirve primero con el pretexto de controlar la calidad del preparado. Nadie interfiere, aprecian sus dedos.

Noshe, feliz, comienza a servirse. Álvarez desaprueba.
El anfitrión decide tomar cartas en el asunto y evitar la apropiación del disco por parte de Noshe de manera convincente. La plebe aprueba el arrojo.
El anfitrión evitando la apropiación del disco en riesgosa maniobra.

La combinación de manos y mandíbulas frenéticas arrecia. Se oyen los más variados efectos sonoros, dignos de película de monstruos hollywoodense. Finalmente desaparece el contenido del disco.
Paul rasca el fondo del disco.

Concluida la cena, se brinda repetidamente por la década netomanciera y el acceso a la dirección de una escuela del anfitrión. El conteo de brindis excede las dos cifras. Comienzan las anécdotas, sobre todo causan gracia las laborales de Decur y Rafa, por ser laborales se entiende. El tema no es trivial, Álvarez se desentiende rápidamente según su costumbre. Los demás no hacen gala de forzosos.
En cierto momento, Decur le reclama a Noshe el pulóver prometido un año atrás. Error. Noshe saca el pulóver de algún lado y cumple su promesa. Las lágrimas invaden los rostros de Decur por la emoción y de Noshe por derramarse el tinto.
Emoción. El pulóver tan temido.
Conmoción. Vino derramado
 Todos se emocionan y se suceden infinitas promesas más como si se tratara de borrachos felices
Promesa cumplida, Noshe regaló el discreto pulóver a Decur.
La noche se estira y las conversaciones delirantes también. Se acuerda elaborar un texto fijo de felicitación a Neto cada vez que intervenga en un concurso, para no recurrir a los lugares comunes que todos conocen: ¡Vamos, Neto!, ¡Felicitaciones!, ¡Merecido premio!, etc.
Típico delirio posbrindis, empiezan las canciones, esta vez sin guitarra. Jingles del año del moño afloran desde las etílicas cuerdas vocales: Pinturerías Acuario, con las que pinta Rosario; Los niños juegan... con los zoquetes y con las medias Ciu-da-dela; Sale el sol, el sol sale para todos y otras antiguallas son oídas con terrífico asombro por Rafa, Paul y Decur. Neto y Álvarez, en evidente elusión gambetera se hacen los que no conocen las inverecundas melodías. José Hugo dirige la orquesta. Noshe y el anfitrión componen un coro de procedencia avernal seguramente.
Cuando el coloquio troca de anécdotas risueñas a declaraciones de amor, el celebrado Neto y el anfitrión deciden echar un manto de silencio y olvido sobre la noche expulsando a los beodos escaleras abajo. Nadie recordará lo sucedido.
Neto y anfitrión a punto de echar un manto de olvido.

Excepto, obviamente, el anfitrión al despertar y encontrar la casa con las secuelas de haber pasado una falange de descontrolados gremlins.


19 comentarios:

  1. Que manera creativas de describir, falange de gremlins, echar a los beodos por la escalera. En la foto que impedis que alguien se apodere de algo, tenés una expresión que asusta.
    Bueno, parece que se divertieron. 10 años de un blog no son poca cosa.

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    1. Más susto debió tener el Noshe, que ni se enteró!
      El festejo de los diez estuvo de diez!

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  2. Jajja ¡Esperaba esta crónica! Sensacional Oso, esa neblina había hecho que olvidara ciertas cosas. Puede ser que José Hugo cantara viejas publicidades? Lo del pulover es un hito en nuestras juntadas! Aplausos Oso!!!

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    1. Uy! Se me escapó lo de las publicidades. Nadie se entera si le hago un agregadito...

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    2. Jaja, che, que las conocí mientras José Hugo las cantaba! Jajaja.

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  3. Sin duda y aun con el resultado de dichas secuelas, y visto y leído lo visto y leído, valió la pena ;-)

    Vengo a saludarte y disfrutarte!

    Bsos!! :-)

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    1. Valió la pena, te lo puedo asegurar, querida Gine.
      Besos

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  4. ¡Hala! Escoba y plumero... :))

    esas son las reuniones que me gustan, pero hay que hacer firmar el contrato antes de entrar por la puerta: "Yo, uno de los invitados a esta gran fiesta, me comprometo a dejar la casa anfitriona más limpia y perfumada de lo que me la encontré. Si así no sucediese, que me salgan granos en el susodicho". Firmado...........

    Un abrazo a todos, chicos.

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  5. Muchas gracias por tan exhaustiva crónica villense. Tus preciosas chicas las mas inteligentes marchando donde la abuela...ya que los lobos al parecer acudían a su casa, ja,ja. Ya veo desde aquí las ganas de colaborar de algunos...aunque solo sea a beber...el pollo todo mérito tuyo, debíe estar riquísimo a juzgar por los restos (ningunos). Buena celebración, buenos amigos ¡y Aragentina sigue de momento!. Con el discreto pullover de Decur...lo raro es que llegara a su casa.Debió llamar la atención de todo el mundo.
    Abrazos y...¡ojalá jaya mas eventos que celebrar! Felicidades a ambos!

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    1. Siempre hay para celebrar, querida Doña Tinta!!

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    2. Siempre hay motivos para celebrar, querida doña Tinta!!

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  6. Me pone feliz verlos felices.


    Besos.

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  7. Que linda reunión , uy como me hubiera gustado probar alguna de esas exquisiteces, mirando las fotos me dió hambre , será la hora ??? jajaja. Un poco más en serio, realmente me encantó que se juntaran para celebrar los 10 años del Blog de Neto nunca hay que dejar pasar esos acontecimientos y además de acuerdo a la usanza argenta, comiendo y bebiendo un poquito jeje.
    Mi estimado Oso no quiero irme sin decirle que su crónica de los hechos ha sido impecable (como siempre) , un gran abrazo y ya que estamos Feliz Día (por mañana, vio?)
    REM

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    1. Bien a lo argento. También feliz día de la Patria y también feliz semi. Vamos!!!

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  8. ¿Cuando sigue la historia del detective Leo y de la ayudante Ines Perta.

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